El delantero cumplió con la ley del ex y le dio la clasificación al Millonario. Respira Marcelo Gallardo. A Racing le queda el sueño de la Copa Libertadores, ni más, ni menos.
El atacante del Millonario convirtió en los primeros minutos del cruce por los cuartos de final de Copa Argentina, tras una jugada que se inició con un gran pase de Marcos Acuña, otro ex Racing. Fue a los 5 minutos del primer tiempo
Ambas parcialidades coparon el Estadio Gigante de Arroyito, en Rosario, y la gente de la Academia hizo sentir su malestar con el atacante Millonario por su convulsionada salida del club. El delantero respondió con un gol en los primeros minutos de partido.
Desde el calentamiento precompetitivo, los aficionados del elenco de Avellaneda le hicieron sentir un clima hostil a Maxi Salas. “El que no salta, es un traidor”, le cantaron en reiteradas oportunidades los hinchas de la Academia al ex delantero de All Boys.
Pese a esto, el futbolista salió a disputar el enfrentamiento con la intensidad que lo caracteriza. Después de un comienzo notablemente trabado en la mitad de la cancha, River golpeó en la primera chance concreta de gol. A los cinco minutos de juego, en un ataque que se inició en el sector izquierdo, Marcos Acuña habilitó a Facundo Colidio con un pase largo que desarticuló a la defensa de Racing.
El atacante del Millonario le ganó la posición a Facundo Mura y tiró un centro de primera para la llegada de Maxi Salas, quien definió de primera desde el punto de penal para vencer la resistencia del arquero Facundo Cambeses. El autor del gol optó por no gritarlo por respeto a su paso por Racing, más allá de que en la previa se especuló con qué iba a hacer el jugador si lograba convertir, a partir de la turbulenta salida del equipo dirigido por Gustavo Costas para recalar en el elenco de Marcelo Gallardo.
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